(a
Jacinto “el huertero”)
Por el empedrado oscila
la sombra de tu sombrero.
………………………..
Reguila ¡Cómo reguila
el agua sobre el pantano!
Te nombran, y
retumba
un suspiro en el templo.
Ella se
persigna y reza.
Reguila, ¡cómo reguila
la verde albahaca en su mano!
Decías: ¿Por qué ponen verjas?
¡Cómo si apresaran
los pesares!
………………………………..
Dejadme pasar que quiero
beber en los manantiales
donde brotan los recuerdos.
Dicen que nada se trae.
Dicen que nada se lleva.
Te llevaste tus contares:
“Éramos como uña y carne,
el día que naciste, le veo
con un anillo en el dedo,
al que gravó tus iniciales.”
………………………..
En la noria de la vida,
ingrata fuerza del sino
Siempre estará Granadilla
y siempre lo no vivido.
Siempre la última silla
y siempre lo no tenido.
………………………….
Un día yo también me iré
y me anegará el olvido.
Y, como tú y yo, ya nadie,
verá en “los membrillares”,
con nostalgia, “El Anillo”.
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Reguila, ¡cómo reguila
en ti la imagen del tío!
jmgd
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