Ay! ¡Virgen Santísima, vaya unos Reyes, los quintos, ha sido en los quintos, que están corriendo los gallos!
¿Qué ha pasado?
¡Le ha tirado el caballo!
¿A quién? ¡Cristo Bendito!
Al de Juan, al muchacho de Juan. Lo tienen en la casa del ejido.
¡Santísimo Cristo de la Salud , Nuestra Señora de la Asunción , que no le haya pasado nada, que está en la flor de la vida!
¡Ay! ¡Desencajadita sale la Águeda, despavorida, dando gritos que parten el alma, por la puerta de la Villa !
¿Por qué lloras Mateo?
Por mi primu Adrián, que s’ha caío del caballu. Y s’ha ío mi madri; y no ha querío que fuera yo; y decía que s’había matao, y que lo llevaba su hermanu cogío com’un muñecu de trapo, tó blancu y no respiraba ni ná.
¡Anda! Reza para que se ponga bien.
“Ángil de la Gualda
dulci compañía
no lo desamparis
ni de nochi, ni de día”
¡Parece que se está recuperando!
¡Ha sido Nuestra Señora de la Asunción que ha hecho un milagro!
¡Ha sido el Santísimo Cristo de la Salud que nos protege a todos!
¡No! ¡Ha sío el Ángil de la Gualda !... ¡El Ángil de la Gualda ha sío!
jmgd
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